Ir al contenido principal

EPÍLOGO: ERZURUN CON OTROS OJOS

Nuestro viaje empezó y acabó en Erzurun. La primera vez que llegamos aquí, a esta ciudad de unos 400.000 habitantes (como Murcia), veníamos de pasar tres días en Estambul y nos pareció que habíamos llegado al culo del mundo. Una bonita calle principal llena de mezquitas y madrasas muy bien conservadas y poco más. Entonces me pareció que todas las mujeres llevaban pañuelos.

Hoy, tres semanas después de haber recorrido la Anatolia turca, le debo una disculpa a Erzurun. Tras recorrer kilómetros y kilómetros de carreteras y caminos precarios, de haber visitado una decena por lo menos de ciudades más pequeñas y otros muchos más pueblos y aldeas perdidas, Erzurun se nos apareció ayer como si fuera Estambul, tan reluciente, tan limpia, tan elegante... Porque ni todas la mujeres llevan pañuelo, y si lo llevan lo hacen desde una discreta modernidad, ni la ciudad es tan provinciana como pensamos al llegar. El conocimiento que hemos acumulado durante estas tres semanas sobre esta zona de Turquía, nos ha hecho mirarla con otros ojos, ahora vemos mucho más que vimos al llegar. Nos pasó exactamente lo mismo en Tasquen, la capital de Uzbekistán. De hecho, alguna vez, viajando por aquí, nos hemos acordado de aquel viaje. Hay algo en estas culturas que se conecta entre sí. Todo está ahí pero nosotros no teníamos las claves para leerlo. De hecho, esta mañana, mientras desayunábamos, me he dado cuenta que justo al lado del hotel tenemos otra cafetería como esa tan buena que había en Rize, en la que me tomé un batido de moka con caramelo salado. Y una confitería con el mejor sutlac (arroz con leche turco) del mundo. Y montones de restaurantes, con la carta en inglés...

En fin, lección aprendida a fuego. Vemos lo que sabemos, Pessoa tenía razón. Si no sabes nada, no ves nada. Y cuando llegamos a Erzurun no sabíamos nada. Ahora sí. Y vemos mucho más. Mis más sinceras diculpas, Erzurun.

Comentarios

Entradas populares de este blog

BIRDWATCHING ANATOLIA

Sólo me falta para cerrar este viaje hablar de los pájaros que hemos visto. De hecho, era una de las motivaciones iniciales. Sabíamos que los ingleses, expertos número uno en esto de pajarear, organizan viajes superexclusivos a esta zona para ver algunas especies raras que sólo se encuentran aquí. Nosotros no hemos conseguido ver todas esas rarezas pero algunas sí. Ahí va nuestra lista (sólo pongo el nombre de la especie, pero si está en la lista es porque Mateo además consiguió identificar si era macho o hembra, joven o adulto, si estaba en fase clara u oscura... A mí me vale con el nombre): - Alimoche - Águila calzada - Aguilucho cenizo - Aguilucho lagunero - Alcaudón dorsirrojo - Alcotán - Archibebe común - Arrendajo - Avefría - Avión común - Avión roquero - Bisbita campestre - Buitre leonado - Busardo de estepa - Busardo moro - Camachuelo carminoso - Carraca - Cernícalo común - Cigüeña blanca - Cigüeña negra - Collalba Isabel - Corneja cenicienta - Escri

NUESTRA FURGONETA ES TURCA!

No os la había dicho hasta ahora pero llevamos viéndolo desde que llegamos: en Turquía, nuestra furgoneta (y los modelos similares de otras marcas) son la estrella del país, las hay por todas partes! Y nosotros encantados, aunque a veces Mateo se confunde y se equivoca de coche, lo cual es muy comprensible :)  PD: Os pongo también una foto del coche que hemos alquilado para que veáis la diferencia. Bsss

RECOGIENDO MORAS EN LOS VALLES GEORGIANOS

De Erzurum seguimos ruta hacia UZUNDERE y los alrededores que son famosos por alojar lo que llaman "los valles georgianos", unos pequeños paraísos verdes regados por riachuelos ubicados en las gargantas de unas montañas enormes y áridas, suaves y envejecidas, que esconden pequeños pueblos cuya singularidad es tener escondidos en la vegetación restos de antiguas iglesias georgianas (s.X-XII) cayéndose a pedazos y que, según la guía, mezclan estilos armenio, persa y seyúcida. Por lo que se ve, esta región fue parte del reino georgiano, claro, no se iban a venir hasta aquí a poner una iglesia cristiana en territorio infiel. El resultado son construcciones macizas, hechas a base de bloques de piedra de colores que alternan tonos claros y oscuros con rojizos, que es la piedra que más abunda por aquí, una piedra ligera, porosa, como de apariencia volcánica. La verdad es que son muy parecidas a las que luego veríamos en la maravillosa ANI, antigua capital armenia ubicada en la misma