Mami, que si recibimos tus comentarios! Estan estupendos! Y los de Ernesto, mi hermanica y mi hermanico! Asi que todo bien por el campo de trabajo de Cuesta Blanca? :) Alegro muito! Ya sabes lo agradecida que te estoy por hacer de canguro canino-gatuno. Sin ti estos viajes no serian posibles.
Os escribo desde Tofo, el paraiso. No os lo podeis imaginar! Ojala estuvierais aqui! Pero como todos los paraisos, la llegada hasta aqui fue dura. Salimos de Maputo a las 8 de la manyana (eso significa que nos levantamos a las 6, despues de salir la noche antes por Maputo, a un macroconcierto en el que eramos los unicos blancos, y fuimos objeto de miradas, risas, muecas y demas, ahora sabemos lo que significa sentirse negro en un pais de blancos :) y llegamos a las 6 de la tarde, viajando en autobuses imposibles, apinyados, amontonados y apretados, casi sin paradas para comer o ir al banyo, sin aire acondicionado y con las ventanas cerradas porque a la gente de aqui estos 25 grados les parecen el colmo del frio y se quejaban cuando abriamos, asi que aguantamos y sudamos todo lo que pudimos, por no hablar de los olores...
El arranque ya fue duro, porque tuvimos que negociar durante una hora el precio, y aun asi nos enganyaron, claro. Aqui en Mozambique toooooooodo el mundo intenta enganyarnos. Y eso que llevamos a Edu, que ejerce de fiero abogado por donde vamos y va defendiendo nuestros derechos, pero claro, quien dijo derechos aqui... con esta cara de blancos que tenemos...
De Maputo a Inhambane, y alli trasbordo hasta Tofo en una furgoneta en la que metieron a veinte personas! Mochilas incluidas. Y bolsas de patatas (podridas), cebollas, cestos de frutas, ninyos, que no cuentan, maletas, bultos de ropa y demas. Durante el camino pudimos ver el Mozambique de verdad, como nos dijo el del hotel. El paisaje cambio por completo. Primero nos encontramos la impresionante selva, con preciosas cabanyas pintadas y una vida tranquila, en torno a sus huertos. Cientos de puestos de anarcardos por el camino, senyalizados con bolsas de plastico. Y despues dunas y palmeras. Y entonces llegamos aqui, al atardecer (no subo foto de la puesta de sol porque este ciber va lentisimo).
Por cierto, la furgoneta en la que viajamos (foto) lleva letras chinas porque son chinas. Fueron cedidas por simpatía política ya que Mozambique también es un régimen comunista, en teoría.
Como anochece muy pronto, nos alojamos en el primero que llevabamos en la lista, un albergue "solidario" que Luci y Jose Gines habian encontrado por internet, el Fatima's, al que no pienso volver en mi vida, porque resulto ser el gran timo. Nos dieron una habitacion hecha de canya, con seis literas (que en los documentales quedan muy bien pero que cuando duermes dentro es como si durmieras en medio de una corriente), colchones de gomaespuna finisimos, que daba igual dormir en una tabla, camas sin sabanas (para conseguir una manta tuvimos que pagar una fianza), aseos colectivos, puerta sin cerradura (a media noche tuvimos una "visita" pero menos mal que Jose Gines, como buen poli que es, la detecto a tiempo y consiguio ahuyentarla), etc. Que guays son los hippys!.
Esta manyana, en cuanto ha amanecido, hemos empaquetado y nos hemos mudado a un sitio estupendo que hemos encontrado Mateo y yo. Unas cabanyas que no salen en la Lonely Planet pero que estoy segura que son mas "solidarias" que el Fatimas. Las lleva una familia negra, sin etiquetas "indigenas", que viven junto al mar, con sus perros y gallinas paseandose entre las casas, que nada mas llegar nos han tratado como a reyes, y nos han dado nuestras mosquiteras, ventiladores, toallas, jabon de rosas y hasta hidratante! nos han lavado la ropa y nos han dejado una keetle, un calienta-aguas de esos que me gustan tanto, con sus tazas y su cafe. Y estan justo enfrente del mar! Perdon, del oceano indico, que no es lo mismo, porque las olas son impresionantes, la luz es diferente y la arena es blanquisima. A mi se me ha alegrado todo el cuerpo!
De comidas, hermana, vamos muy bien. En cuanto salimos de Sudafrica todo cambio. La influencia portuguesa se nota y cada dia comemos mejor: pollo, pescado, calamares y hasta sopita rica nos cenamos anoche, acompanyados de arroz, batata o patatas fritas, lo que quieras (yo no pruebo el pescado, tranquila, madre). Las ensaladas las evitamos. Y mucha fruta. Ahora estamos en temporada de papaya y nos las estamos comiendo todas. Tambien bebemos, claro, que no solo de pan vive el hombre. Aqui la bebida nacional es la cerveza 2M y la pinya colada, asi que nosotros nos integramos sin rechistar.
Nos esta gustando tanto el sitio que estamos pensando alargar la estancia. Y encima hay unos puestos de pareos y pulseras que son una explosion de color y una alegria para los ojos. Aqui todo es mucho mas tranquilo que en Maputo y lo estamos agradeciendo.
Hasta el proximo ciber, cienbesos a todos!
Comentarios
Publicar un comentario